Sesión Número 6

La sesión número seis corresponde a la sesión número siete tal como está programada en el proyecto.

Esta sesión se llevó a cabo el miércoles 07 de Abril. El título es ‘’Pongámonos cara’’ y es la primera sesión del módulo número tres del programa dedicado a la inteligencia emocional.

Los objetivos que se pretenden alcanzar son el de identificar y saber diferenciar las distintas emociones distinguiéndolas de las acciones, así también que aprendan a ponerse en el lugar de otras personas, es decir, fomentar la empatía.

La sesión del este día consta únicamente de una actividad. Se llevará a cabo en el aula ordinaria como medida de castigo por la sesión de la semana anterior en la que sus comportamientos no fue del todo bueno. Por lo tanto se desarrolló en el aula. Los monitores que estuvieron y desarrollaron juntos la sesión ese día fueron: Amparo, Isa, Rocío, Fátima, Ana y José María.

Al empezar la sesión se les indagó en qué creían ellos que era una emoción. Todos los alumnos y alumnas empezaban a poner ejemplos de emociones y parecían haberlo entendido muy bien. Cada monitor se haría cargo de cuatro alumnos, que formarían grupos de dos. Cada uno de estos grupos representarían por parejas una determinada emoción que se les entregaba a modo de ficha. Cada pareja de alumnos guiados y ayudados por sus respectivos monitores, deberían de buscar una idea de cómo representar esa ilustración, así también de averiguar de qué emoción se trataba.

Una vez que ya tenían preparada la representación, todos los alumnos volvieron a sus asientos de clase y a cada uno individualmente se les repartió una ficha. En esta ficha tendrían que poner el nombre de los compañeros por orden de salida que iban a representar la emoción y cada uno sin decir nada tenía que averiguar de qué emoción se trataba. Arriba en la ficha nos encontrábamos con dos caras tristes :-( que significaban dos ‘’comodines’’ para aquel que hiciese la gracia y dijese en voz alta cual es la emoción que estaba viendo y estropease la actividad a sus compañeros.

Pareja por pareja iban saliendo y mostraban de forma animada, lúdica y simpática las emociones que les había tocado. Todos sus compañeros anotaban las respuestas que creían que era. Al terminar la representación, la pareja decía en voz alta la emoción que estaba representando y los demás compañeros de la clase iban poniendo una cruz en la ficha si habían acertado. Hay que decir, que esta actividad les traía mucha confusión en diferenciar las emociones de las acciones, es decir, si la pareja estaba representando ‘’un hombre que le da un susto a la otra persona’’ muchos niños y niñas escribían la acción de ‘’susto’’ en vez de la emoción de ‘’asustado’’. Por lo tanto se les hacía mucho hincapié en este aspecto, ya que la sesión se trataba de eso, de averiguar las emociones, no las acciones.

La sesión por lo tanto termina con todas las parejas empatizando las emociones y los demás averiguándolas. Como nota, habría que decir, que muchas representaciones lógicamente y al ser niños, traían confusión en los niños. Las emociones que más les costaron distinguir era la diferencia en las representaciones de ‘’pensativo’’ y ‘’aburrido’’, así también el problema anteriormente comentado, las dificultades para distinguir acción y emoción.

Como conclusión, todos los alumnos y alumnas se divirtieron mucho y compren dieron el valor de las emociones dándole importancia a los sentimientos ajenos, ya que la empatía era el aspecto fundamental a tratar en esta sesión.